Día de la madre entre los ucranianos en Guissona

El día 8 de mayo la comunidad ucraniana afincada en Guissona celebró su tradicional día de la madre, muy celebrado por los cristianos greco-católicos y ortodoxos de esta comunidad. En la plaza del Ayuntamiento tuvo lugar una concentración de los ucranianos residentes y refugiados acogidos en Guissona en un acto lleno de calidez y sentimiento, donde los niños de origen ucraniana quisieron celebrar ese día ofrenando sus bailes típicos y sus canciones. Al acto asistió el Arzobispo Joan-Enric, acompañado del Rector de la Parroquia de Sta. María de Guissona, Mn. Ramon Balagué, y del cura que cuida de la comunidad greco-católica, P. Taras kogut.

Para Ucrania, el “día de la madre” es una efeméride especial por tres motivos: en primer lugar, para hacer memoria y venerar, la “Madre del cielo”, Sta. María, que en la Parroquia católica de rito latino de Sta. María de Guissona es venerada en un altar por los fieles ucranianos mediante el icono de la Virgen de Zarvanytsya (Ucrania). En segundo lugar, para recordar y ser el día de las madres de la tierra, las que han engendrado la vida de sus hijos, llevando en su vientre durante 9 meses a las criaturas que nacerán y les han hecho crecer con gran amor. Con emoción, los ucranianos, agradecieron y recordaron a las madres, las que ya están en el cielo y las que se han quedado en Ucrania sin poder salir del conflicto armado que allí se vive. Y en tercer lugar, es el día de la madre, para agradecer a la madre tierra, la casa común, que nos engendra, alimenta y viste, trabajándola y dándonos sus frutos.

Guissona, la «pequeña Ucrania de Cataluña», la Parroquia católica ha trabajado intensamente el dispositivo desplegado y liderado por el Alcalde Ilmo. Sr. Jaume Ars, para acoger a los refugiados llegados en estos meses –casi todo son mujeres y niños–, que escapan de la guerra. Esta población de La Segarra, donde uno de cada siete habitantes es de origen ucraniano (hay censadas 7.000 personas), está dando una lección magistral en toda España con su respuesta al drama sobrevenido por este éxodo histórico especialmente femenino e infantil. El arzobispo Joan-Enric les dirigió unas palabras de solidaridad y ha explicado que está en contacto con el obispo auxiliar de Kyiv Mons. Stepan Sus, a quien ya ha enviado directamente una buena ayuda solidaria para los sacerdotes y heridos.

La parroquia de Guissona, junto con el Ayuntamiento, Cáritas diocesana y parroquial de Guissona, empresas privadas y particulares, han acogido en los últimos meses a más de 300 personas procedentes de Ucrania. La mayoría han sido acogidas en unidades familiares, ya que muchos tienen familia en Guissona y en el área inmediata. La comunidad ucraniana en Guissona es importante y se ha organizado desde el primer momento de la crisis, consiguiendo la llegada de su responsable, el P. Taras Kogut, que había sido retenido cuando estaba de visita con su hijo en el momento de estallar el conflicto.

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