Misa de preparación a la Navidad en el Centro Penitenciario de Andorra

El Arzobispo de Urgell y Copríncipe de Andorra, Mons. Joan-Enric Vives presidió el miércoles 18 de diciembre la tradicional celebración navideña en el Centro Penitenciario de La Comella, en el Principado de Andorra. Fue recibido a su llegada por el Director del centro, Sr. Francesc Tarroch, y por el Director adjunto, Sr. Ismael Hernando, con los que mantuvo una entrevista personal. Fue informado de que en el Centro actualmente había ingresados ​​58 internos, 6 de los cuales son mujeres. Una importante parte de los internos son de nacionalidad andorrana o residentes, y hay reclusos de varios países.

Mons. Vives animó a la dirección del Centro a seguir en la línea de mantener y ampliar talleres y espacios de formación para los internos. Actualmente, hay cuatro monitores y personal que ayuda en la formación, y creación de talleres de manualidades y arte. Además, un equipo de voluntarios ayuda en la formación de los internos que quieren mejorar el nivel de estudios, y prepararse para el acceso a la universidad.

Después se inició la celebración eucarística, con un buen número de internos asistentes, que fue solemnizada por los alumnos de la escuela Mare Janer de Santa Coloma y del Colegio Sant Ermengol, acompañados de maestros y profesores y de la Directora del Colegio Sant Ermengol, Sra. Anna Villas.

El Arzobispo, en su homilía, animó a los internos a tener coraje en la situación de privación de libertad, recordándoles que es en la Navidad cuando Jesús viene al mundo para salvar, y que hay muchas personas que también viven con dureza estos días: las que están sometidas a la penuria de la guerra, las que viven separados y lejos de los que aman, los enfermos, los de trabajos que los obligan a estar lejos… la falta de libertad es muy dura especialmente en estas fiestas, pero sus familiares y seres queridos están cerca, y también el obispo quiere estar muy cerca de él, en nombre de Jesús. Rezó por todos y les animó a hacer un silencio de recuerdo y oración por los familiares y amigos que aman. Los exhortó a no desanimarse porque todos eran muy queridos por Dios.

Al terminar, cada interno recibió un obsequio de Cáritas Andorrana y un libro del comentario del Evangelio para cada día y pudo tener un breve encuentro y diálogo con el Arzobispo, en la que le transmitieron sus inquietudes personales y su agradecimiento por la visita en unos días tan señalados, antes de Navidad.

Posteriormente, hubo un pequeño acto de agradecimiento de la Dirección hacia los jóvenes escolares y maestros que habían participado en la celebración, donde tuvo lugar una explicación del tipo de talleres que los internos hacían, y en el que el Copríncipe quiso agradecer en nombre de todo el país el trabajo de los funcionarios del Cuerpo Penitenciario de Andorra en el ejercicio de su función.

Mons. Vives estuvo acompañado por Mn. Ramon Sàrries, Arcipreste de los Valles de Andorra y Delegado de Pastoral Penitenciaria de la diócesis, que concelebró con el Arzobispo la Eucaristía, y por la Delegada de Medios de Comunicación, Sra. Cristina Orduña.

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