La Catedral de Santa María de Urgell acogió el día 3 de noviembre la solemne celebración de la fiesta de Sant Ermengol, patrón secundario de la diócesis de Urgell, y también el acto de toma de posesión de tres nuevos canónigos: Mn. Jordi Miquel Benavent, Mn. Josep Uriel Álvarez Bedoya y Mn. David Codina Pérez.
Por la mañana se reunió el Capítulo presidido por el Decano M.I Mn. Benigne Marquès Sala y después tuvo lugar el tradicional almuerzo fraterno con el Arzobispo, en el Seminario diocesano.
Por la noche, Mons. Joan-Enric Vives, presidió la celebración de San Ermengol en la Catedral. Fue San Ermengol, obispo de Urgell, quien fundó la Canónica en la Catedral en 1010.
A la fiesta, asistieron representantes del Retablo de San Ermengol, familiares de los nuevos canónigos y fieles de la Parroquia de San Odón.
En su homilía el Arzobispo glosó las lecturas de la Palabra de Dios proclamadas que subrayaban el valor de tener pastores que guíen al rebaño de Dios según el corazón del Buen Pastor: Jesucristo. Mons. Vives destacó las cualidades que debe tener un pastor siguiendo lo que reclama el Papa Francisco: cercanía con el pueblo de Dios, atención especial a los más pobres y marginados, a los enfermos, y a los que sufren, no ser príncipes sino humildes y sencillos, y trabajar por la comunión entre el presbiterio, los fieles y con estrecha comunión con el Obispo diocesano. Un ejemplo de ello fue el Obispo San Ermengol, que ejerció su Pontificado de 1010 a 1035, destacando las reformas del clero que llevó a cabo, cómo alimentó a los pobres y ahuyentó a los alarbes. La santidad del obispo se puso de manifiesto en su piedad y amor a los pobres, su insistencia en un culto a Dios esplendoroso, su amor a la Eucaristía, y el deseo de una vida reformada de los presbíteros con la institución de una canónica con la oración y la vida en común de sus clérigos. Construyó iglesias y puentes, arregló y preparó caminos y trabajó mucho para que se mejoraran las condiciones de vida de los fieles.
Finalmente recordó el servicio que significa el oficio de canónigo y los nombres de algunos canónigos ilustres de Urgell como los históricos San José de Calasanz; Pau Claris; Joan Brudieu, y de los más cercanos y ya traspasados Pere Pujol y Albert Vives.
Después de la celebración litúrgica, los nuevos canónigos pudieron saludar y agradecer personalmente la presencia de todos los que se hicieron presentes en la Catedral en una celebración tan gozosa y abierta al futuro. Una fotografía de familia del Capítulo con el sr. Arzobispo concluyó la gozosa celebración.
