El sábado 3 de junio el Colegio «Mare de Déu dels Socós» de Agramunt celebró la Jornada de la Familia, organizada por el AMPA del centro y con la participación e implicación de toda la comunidad educativa: maestros, alumnos y sus alumnos respectivas familias. La celebración tuvo lugar en el pabellón polideportivo de Agramunt, lugar en el que se desarrollaron todo un abanico de actividades que se programaron para poder hacer más festivo y participado el día. Desde primera hora de la tarde y hasta la medianoche en el pabellón agramuntino hubo juegos, talleres, hinchables, sardanas, sorteos, música,…
También se celebró una eucaristía, preparada desde el equipo de pastoral del colegio y que quería recoger parte del trabajo realizado a lo largo del curso en el ámbito religioso y de espiritualidad. La celebración comenzó con un breve resumen de los principales puntos de la encíclica “Laudato si” que fueron desgranando y leyendo algunos de los maestros del claustro, puntos que estaban en consonancia con el lema transversal de este curso: “Vive. ¡Deja tu huella!”. A lo largo de la celebración de la misa estas huellas se hicieron presentes para recordar el camino que hacen los alumnos para hacer un mundo más sostenible y respetuoso con la Creación, un camino que también ayuda a construir la escuela con su formación también en el ámbito de los valores.
Los alumnos de Ciclo Superior acompañaron con la música y los cantos en la celebración; también se hicieron ofrendas y oraciones que recordaban este amor por la naturaleza y la importancia en este proyecto de la familia. Uno de los momentos más vividos fue el de la paz, en la que todos los participantes a la misa se dieron un buen apretón de manos y muchos abrazos. Mn. Jaume Mayoral, que presidió la eucaristía, les recordó el mensaje de la lectura del evangelio de las Bienaventuranzas que leyeron previamente, un mensaje que recordaba la labor de la familia, de la escuela y del mundo para crear una educación por la paz y que hiciera posible que la felicidad sea para todos los niños, especialmente para los más vulnerables.
Por la noche, las familias compartieron una cena de hermandad, y acto seguido, un sorteo alegró especialmente a los alumnos, y de entre ellos, los de primer curso, que fueron muy afortunados con los regalos. Después hubo un rato por la música y a media noche la celebración se acababa, con la felicitación para el AMPA de la escuela que, con su esfuerzo, consiguió un participado y lúdico Día de las Familias.
