El lunes 8 de julio por la mañana, en el Seminario de La Seu d’Urgell, tuvo lugar la reunión ordinaria de la Asamblea General de Cáritas Cataluña.
La reunión fue presidida por Mons. Joan-Enric Vives, arzobispo de Urgell y presidente de Cáritas Diocesana de Urgell y por Mons. Javier Vilanova, obispo auxiliar de Barcelona y obispo delegado de la Conferencia Episcopal Tarraconense (CET) en Cáritas Cataluña. Ambos estuvieron acompañados por Francesc Roig, presidente de Cáritas Cataluña, Mn. Jaume Mayoral, delegado episcopal de Càritas Diocesana de Urgell, y Josep Casanova, director de Càritas Diocesana de Urgell y vicepresidente de Cáritas Cataluña.
Tras la acogida de los prelados y de los parlamentos protocolarios, se trataron temas de calado como, por ejemplo: el retraso en el pago de la convocatoria de la Generalitat de Cataluña (CONVO-24); el futuro del reparto de los alimentos; la Iniciativa Legislativa Popular para la regularización de personas migradas en situación de irregularidad administrativa y la renovación de la Presidencia y de dos vicepresidencias de Cáritas Cataluña.
Respecto al retraso en el pago de la CONVO-24, se puso de manifiesto que éste es un tema vital para la sostenibilidad económica de las entidades del tercer sector social, sobre todo las más pequeñas que si no reciben puntualmente las subvenciones tienen problemas tesorería y complicaciones para pagar las nóminas de los trabajadores.
Hace tiempo que las entidades sociales piden a la Administración de la Generalitat que se mejore la formulación de las convocatorias, justificaciones, pagos y calendario. Desde el Departamento de Derechos Sociales de la Generalitat de Cataluña están tratando de ponerle solución.
Sobre el cambio de modelo en la donación de alimentos en especie, se dio énfasis en que éste es un tema complejo y que requiere, en primer lugar, que tanto la Administración del Estado como las administraciones autonómicas acaben de definir el modelo de intervención que, por ahora, no está totalmente concretado.
Lo que sí debemos tener muy claro es que esto es un cambio de paradigma, sobre el que las Cáritas parroquiales y diocesanas deben reflexionar y ver cómo reorientar este servicio vital que han dado durante décadas nuestras Cáritas parroquiales. Seguramente, tendrán que convivir dos modelos – el antiguo y el nuevo – a la vez. Precisamente en la Asamblea General de Cáritas Cataluña se puso en marcha un grupo de trabajo que se pondrá de inmediato y que contará con la participación de las Cáritas parroquiales y diocesanas.
Otro tema primordial y trás el cual ha estado presente Cáritas desde el primer momento, es la Iniciativa Legislativa Popular (ILP) para la regularización de personas migradas en situación de irregularidad administrativa, junto con otras entidades de la Iglesia católica y del tercer sector social. Por el momento, ha sido admitida a trámite y seguirá su recorrido en el Congreso de los Diputados.
Por último, se presentaron diferentes candidaturas para la Presidencia de Cáritas Cataluña y también se efectuó el relevo en las vicepresidencias de las zonas Ponent y Sur. Este año finalizan su servicio los vicepresidentes Josep Casanova, director de CD Urgell (Zona Ponent) y Agustí Adell, secretario general de CD Tortosa (Zona Sud). La Asamblea General de Cáritas Cataluña ha aprobado los dos relevos que han recaído Rafael Allepuz, director de CD Lleida (Zona Ponent), y Pere Lluís García, secretario diocesano de CD Tarragona (Zona Sud).