La festividad de San Odón se celebró en la Catedral de Santa María de Urgell, el jueves 7 de julio, con una misa solemne, que fue presidida por el Arzobispo de Urgell, Mons. Joan-Enric Vives, y concelebrada por el Rector de la parroquia de San Odón Mn. Ignasi Navarri, el Vicario General, Mn. Josep M. Mauri, el Decano Mn. Benigne Marqués y Mn. David Codina, con el diácono Mn. Antoni Serra. Acolitaron los seminaristas. Contó además con la asistencia de representantes del Ayuntamiento y autoridades, y de las fuerzas de seguridad de la ciudad, la Junta de la Hermandad de San Sebastián y una buena cantidad de fieles.
En su homilía el Arzobispo Joan-Enric glosó la figura de San Odón, patrón de la ciudad de La Seu d’Urgell, y cómo fue un pastor con un celo ardiente que se preocupó por los más pobres y por el culto divino. Recordó cómo Dios ejerce de Pastor de todos nosotros, a través de pastores mediadores. Muchos son pastores, cada uno desde su propio ámbito, y animó a orar y sostener especialmente la labor de los pastores presbíteros y diáconos, y a pedir a Dios el don de nuevas vocaciones que puedan guiar a la comunidad cristiana y hacer presente a Jesucristo. Animó a todos los fieles a ser pastores, maestros, velando por quienes tenemos al lado, especialmente los más necesitados, y animó a perseverar en el amor de Jesús. Recordó cómo acabamos de cerrar la estapa diocesana del Sínodo «Por una Iglesia sinodal: comunión, participación y misión» y cómo la Iglesia siempre está en camino y cómo todos estamos llamados a hacer camino unos con otros.
Al terminar la misa, en la Plaza de los Olmos, junto a la puerta lateral de la Catedral, hubo baile de sardanas y torta y vino, ofrecidos para todos para celebrar con gozo el santo patrón de la ciudad.