El jueves 7 de abril en la iglesia de la Residencia de las Hermanas de la Sagrada Familia de Urgell de La Seu d’Urgell tuvieron lugar las exequias de la Hna. M. Rosa Carrera i Servent, del Instituto de Hermanas de la Sagrada Familia de Urgell, de 88 años de edad y natural de Sant Martí de Canals (Lleida).
La celebración fue presidida por el Arzobispo de Urgell, Mons. Joan-Enric Vives, y concelebrada por los Vicarios Generales de Urgell, Mn. Josep M. Mauri y Mn. Ignasi Navarri; por el Vicario Episcopal, Mn. Antoni Elvira; por el Arcipreste de los Valles de Andorra, Mn. Ramon Sàrries y por los presbíteros de La Seu, Mn. Jordi Miquel, Mn. Lluís Portabella, Mn. Agustí Brescó y Mn. David Codina.
En la Eucaristía estuvieron presentes la Hna. Victoria Beltran, Consejera General del Instituto; la antigua Superiora General del Instituto, Hna. Irma Beretta, la Superior de la Comunidad, Hna. Piedad Pérez, las otras hermanas de la comunidad de La Seu d’Urgell, familiares de la Hna. M. Rosa Carrera y otras religiosas, y vecinos y fieles de La Seu que la amaban y apreciaban, y que quisieron acompañarla.
En su homilía el Arzobispo glosó las lecturas de la Palabra de Dios proclamadas subrayando como la Hna. M. Rosa ejerció en su vida como Superiora General siendo una servidora de las Hermanas, una “sirvienta de los sirvientes de Dios”, viviendo su consagración como religiosa y su servicio como Superiora General siempre sirviendo y entregándose por el bien del Instituto de Hermanas de la Sagrada Familia de Urgell. El Arzobispo subrayó cómo toda vocación, pero especialmente una vocación a la vida consagrada, es una entrega de toda la vida, con generosidad, en el carisma concreto del Instituto de las Hermanas de la Sagrada Familia de Urgell, siguiendo las huellas de la Beata Anna Maria Janer, a la que la Hna. M. Rosa Carrera siempre amó, colaborando, por ejemplo, en todo lo necesario para su Beatificación. Últimamente, se unió a la pasión y la cruz de Cristo, compartiendo el dolor y la enfermedad, y lo hizo con actitud de entrega y sacrificio, sin perder nunca la sonrisa.
La Hermana María Rosa Carrera Servent nació en Sant Martí de Canals, Lleida, el 4 de noviembre de 1933. Su educación fue en la Escuela Nacional de San Martín de Canals y en el Colegio Sagrada Familia de La Pobla de Segur. El 24 de septiembre de 1950 ingresó en el postulantado en El Masnou, Barcelona. Emitió su primera profesión el 14 de abril de 1953 y, su profesión perpetua, el mismo día del año 1958. Fue destinada a las comunidades – colegios de Avinyó, Barcelona (1953-54), Matadepera (1954-55), Joaquín Mª López, Madrid, (1955-63) casa de Estudios Junior de Aviñón, Barcelona (1963-65), Sabadell (1965-67), Palomeras, Madrid (1967-70), Puebla de Seguro (1970-84), El Clot, Barcelona – Casa Provincial (1984-1993). En 1993, el XX Capítulo general la eligió como Superiora general. Fue reelegida para un segundo sexenio en 1999 por el Capítulo General sucesivo, cargo que desarrolló hasta 2005. El XXII Capítulo General la eligió 1ª Consejera y Vicaria. Después fue destinada a Perú donde trabajó mucho con la Iglesia local para dar a conocer a Jesús y el carisma de la Beata Anna Maria Janer. Posteriormente estuvo destinada a México, donde disfrutó mucho de las jóvenes que formaban parte de la casa de formación en ese momento. Pasado el tiempo regresó a España siendo destinada a la comunidad de Rubí. En 2019 fue destinada a la comunidad de Seu d’Urgell, donde estuvo muy cerca de quien, por ella vio siempre como una Madre, la Beata Anna Maria Janer. Por ella la Madre Janer fue ejemplo de lo que ella misma vivía en ese tiempo de su vida. Hermana de todos, amorosa, entregada, delicada y siempre sirviendo con lo que ella podía hacer.