El día 11 de mayo, el Arzobispo de Urgell Mons. Joan-Enric Vives presidió la Eucaristía del VI Encuentro de las Delegaciones de la Cofradía de la Virgen de Montserrat en el Santuario de Montserrat.
Fue un encuentro para recordar y agradecer la peregrinación a Roma del año pasado, coincidiendo con el 800 aniversario de la fundación de la Cofradía de la Virgen de Montserrat.
Fue en el marco de aquella peregrinación que el Papa Francisco ofreció la Rosa de Oro pontificia a la Virgen de Montserrat que como gesto de deferencia se situó sobre el altar en el encuentro de las Delegaciones de la Cofradía del día 11.
El Rector del Santuario, P. Joan M. Mayol, osb, concelebró la Eucaristía con el Arzobispo y dio la bienvenida a todas las Delegaciones expresando el gozo del encuentro que este año ya llega a su sexta edición.
Después de la Misa hubo una comida de hermandad y la visualización de un vídeo-recuerdo de la peregrinación de octubre 2023 a Roma.
El objetivo de la Cofradía es extender y facilitar la devoción a la Virgen de Montserrat, con la vinculación al Santuario y la creación de centros que, como auténticos pequeños santuarios, acerquen el amor que Dios manifiesta en su Montaña Santa en todos los fieles. Esto se hace con la oración personal y, sobre todo, con la organización de celebraciones los días que la Iglesia celebra la Virgen, especialmente las dos fiestas montserratinas del 8 de septiembre y del 27 de abril. Cada año, el sábado sobre el 27 de abril, los cofrades son invitados a subir a Montserrat para una celebración en el Santuario, en la que se dará a los nuevos cofrades el recordatorio y la medalla de la Cofradía. Igualmente, el sábado sobre el 8 de septiembre son invitados a venir a la celebración en recuerdo y sufragio de los cofrades difuntos.
La Cofradía, pues, tiene un centro principal, en el santuario de Montserrat, y centros delegados, esparcidos por todo el mundo, que participan de la vida y la oración de Montserrat. Para ser cofrade es necesario inscribirse en cualquier centro delegado o en el propio Montserrat. Los cofrades no tienen obligaciones determinadas, pero se recomienda una vida activa de oración. Para facilitarlo, el Santuario, la casa común de todos los cofrades, propondrá materiales para la oración personal o en grupo. Se recomienda muy vivamente la participación en los actos que la Cofradía organiza en los centros delegados.