El día 21 de mayo el Centro de Congresos de Sant Julià de Lòria (Principado de Andorra) acogió las XXIII Jornadas de la Sociedad Andorrana de las Ciencias (SAC) que este año profundizaron sobre “Simeón de Guinda, el Copríncipe desconocido”, organizadas por la SAC y por el colectivo recientemente creado “Simeón de Guinda”.
Se expusieron once ponencias presenciales donde se trató la figura de este copríncipe de Andorra y obispo de Urgell, Simeón de Guinda Apeztegui, pirenaico, navarro del pueblo de Epartza, en el valle de Salazar, que jugó un papel fundamental para que Andorra no fuera fagocitada por los reinos de España ni de Francia, una vez ejecutados los Decretos de Nueva Planta, promulgados por Felipe V, en 1716.
Este proyecto divulgativo, que ha cristalizado en la Jornada de estudios del sábado día 21 de mayo, ha sido posible por el esfuerzo e interés de un grupo de amantes de la historia liderados por Robert Lizarte y Quim Valera, en que se añadieron enseguida otras personas: Sara Ubach, Laura Casanovas, Domènec Bascompte, Jordi Pasques, Climent Miró, Alfred Llahí, Oliver Vergès, Toni Pol, Àngels Mach y Andrés Luengo.
Tal y como afirma Quim Valera, “reconocer a De Guinda es reconocer nuestra historia, nuestra vinculación con el resto de los pirenaicos, que en este caso concreto, también nos hermana con los de Navarra. Fue gracias a él que hoy no somos un rincón olvidado de España, manteniendo intactas nuestras instituciones y autogobierno ancestrales. Fue él quien nos puso en el camino de estar alerta, por eso, pocos años después de su muerte, el Consell encargó el Manual Digest. Le debemos, como mínimo, el recuerdo. En ese sentido, nuestra gratitud a las autoridades. Empezando por nuestro actual Copríncipe episcopal, que nos recibió con toda la calidez en Palau, compartiendo nuestro entusiasmo. También desde el Ministerio de Cultura de Andorra, encabezados por su titular, así como los Cónsules de Sant Julià de Lòria (lugar donde murió Simeó de Guinda). Estas instituciones nos han ofrecido desde el primer momento la mano tendida en nuestro proyecto divulgativo. En justicia y gratitud, el Común de Sant Julià de Lòria nos ha ofrecido sus instalaciones y servicios para llevar a cabo la Jornada. Vaya por delante nuestra gratitud a todos los que han visto viable el proyecto y nos han querido echar una mano. Desde el colectivo no pretendemos organizar un día de historiadores, ni un coloquio de expertos, nuestra máxima ilusión es hacer pedagogía y difusión bajo la innegociable premisa de que no puedes amar lo que no conoces. Por tanto, entendemos que nuestro patrimonio histórico y cultural debe ser conocido, antes de ser querido y valorado”.
Las jornadas contaron con la asistencia en su clausura del Arzobispo y Copríncipe Mons. Joan-Enric Vives, que en su intervención destacó la importancia de este Copríncipe episcopal (1714-1737) y subrayó cómo, entre otros hechos, gracias a su intervención logró que no se aplicara en el colegio que la Compañía de Jesús tenía en La Seu d’Urgell, la orden real que suprimía todas las universidades de Cataluña, y sobre todo que Andorra gracias al Copríncipe Simeón de Guinda, salvó su independencia y soberanía.