El Arzobispo de Urgell y Copríncipe de Andorra, Mons. Joan-Enric Vives, impartió una de las conferencias pascuales programadas por el arciprestazgo de los Valles de Andorra el día 14 de mayo, en la Sala de conferencias de la Iglesia de Santa María del Fener (Andorra la Vella). Y asistieron el arcipreste de los Valles de Andorra, Mn. Ramon Sàrries, el Vicario episcopal y Rector de Encamp, Mn. Antoni Elvira, el Embajador del Reino de España en Andorra, Excmo. Sr. Àngel Ros y los rectores de las parroquias de Andorra y un buen grupo de fieles.
Con el título «por un cristianismo más virtuoso» el Arzobispo animó a vivir con más intensidad y radicalidad la fe cristiana desarrollando el sentido profundo del «Magis» ignaciano. Destacó cómo el cristianismo es el encuentro personal con Jesús y que este encuentro personal debe impregnar la totalidad de nuestro vivir y debe traducirse con obras concretas de estimación a Dios y a los demás. Desgranó algunas de las actitudes fundamentales de todo cristiano: ser instrumentos de paz, el diálogo con todos, la apertura a los demás, poner a los pobres y a los marginados en el centro de nuestra iglesia … Para hacer esto hay una íntima unión con Jesús a través de la lectura de la Palabra de Dios, la participación en los Sacramentos, y la confianza en la Madre Iglesia.
Finalmente, presentó las palabras del Cardenal Bergoglio a las Congregaciones Generales antes de su elección como Papa: la Iglesia debe evangelizar a todos saliendo de sí misma yendo a las periferias existenciales para no caer en la autorreferencialidad ni en el mundanismo espiritual. Todo un programa para la Iglesia ya indicado por el Cardenal Bergoglio que después ha procurado ejercer una vez elegido como Papa Francisco.