En la Catedral de Sta. Maria de La Seu d’Urgell, la acción litúrgica de la Pasión del Señor fue presidida por el Arzobispo de Urgell, Joan-Enric Vives, el Viernes Santo, día 2 de abril.
La celebración de la Pasión del Señor contó con 3 partes: Liturgia de la Palabra, Adoración de la Cruz y Sagrada Comunión.
La Liturgia de la Palabra comenzó con la lectura del libro de Isaías y la lectura de la carta a los Hebreos. Después se proclamó el bello texto de la Pasión según San Juan. Tras la homilía tuvo lugar la Oración universal que en este día es especialmente solemne. Este año se añadió una intención especial «por los que sufren en tiempos de pandemia» pidiendo que «Dios Padre conceda salud a los enfermos, fortaleza al personal sanitario, consuelo a las familias y la salvación a todas las víctimas que han fallecido».
La segunda parte consistió en la Adoración de la Santa Cruz, que este año besó sólo el Sr. Obispo mientras los demás concelebrantes y los fieles que seguían la celebración desde sus sitios en el templo catedralicio le adoraron e hicieron un momento de silencio intenso para venerarla.
La tercera parte consistió en la Sagrada Comunión de las especies que se habían consagrado el día antes, Jueves Santo.
Tras la comunión y la oración sobre el pueblo, el Sr. Obispo animó a los fieles a unirse espiritualmente desde sus hogares a la oración ante el Cristo de la Preciosísima Sangre que tendría lugar esa noche en la Catedral en sustitución de la Procesión.
La colecta se destinó a Tierra Santa como muestra de apoyo y comunión con los hermanos de la Tierra de Jesús.