El Retiro de Adviento para los fieles de la Diócesis de Urgell se llevó a cabo el 14 de diciembre, en la Casa de Espiritualidad Santo Cristo de Balaguer, dirigido por el Obispo Coadjutor de Urgell, Mons. Josep Lluís Serrano, con la asistencia de numerosos fieles de todo el territorio.
A las diez de la mañana, después de la acogida, empezó la Jornada de Retiro con la oración de Laudes, pidiendo la ayuda de Dios y de su Santo Espíritu Después, en la misma capilla pequeña del Santo Cristo, Mons. Serrano inició su charla, que siguió un esquema tomando como referente una estructura Ignaciana.
Trató de los elementos claves para la oración: desde la realidad de la Parábola del Sembrador y de cómo, cada semilla, representa la realidad humana y cómo cada una de las realidades y acciones da un fruto… quizás unos lo hacen a los 10 años, de otros, en los 70, y otros en los 90. Y otros, tal vez no dan fruto, una relidad muy actual. Señaló como esta parabola, sigue siendo muy actual en nuestra vida y en nuestra realidad y es por eso que el Receso de ese día tenía la voluntad de enfocar la elección de ser una buena semilla y dar buen fruto. Mundos. Serrano señaló que esta actitud nos pide, en el Adviento, tener confianza, confianza en un Dios cercano.
Al finalizar esta reflexión se llevó a cabo la Adoración Eucarística, poniendo en la reflexión los elementos dados en la primera parte. Es en este tiempo cómo se puede sentir cómo la oración hace mella y nos prepara para ese tiempo de Navidad que se avecina. Nos ayuda a dar fruto en lo profundo del corazón del hombre y cómo Dios transforma. Por eso, esta Parábola del Sembrador nos invita a dar vida con los hermanos, porque así es la palabra de Dios: nos da una nueva vida.
El Retiro continuó con la Reserva eucaristíca y la Bendición que invitó a los asistentes a vivir la Santa Eucaristía con total plenitud, y con ella, a ser enviados a llevar la Buena Noticia del Evangelio. Mundos. Serrano recordó que se nos invita a ser esas semillas que van a germinar en el futuro, y con ello, estar abiertos a dar fruto en abundancia.
Terminó el Retiro con una comida en fraternidad, queriendo crear así esta hermandad como Diócesis, como miembros de la iglesia local del obispado de Urgell; siendo una Iglesia en salida, capaz de vencer las dificultades que pueden existir; pero que con su Gracia y con la preparación del tiempo de Adviento se está más cerca de conseguir.