El domingo día 23 de abril, domingo III de Pascua y popular fiesta de San Jorge, el Arzobispo de Urgell Mons. Joan-Enric Vives, administró el sacramento de la Confirmación en las Parroquias de San Andrés de Oliana y Sta. María de Organyà. Concelebraron con el Arzobispo, el Rector y Arcipreste del Alt Urgell, Mn. Jordi Vásquez y Mn. David Codina. En Oliana, fueron 5 los jóvenes confirmandos y en Organyà 4.
El Sr. Arzobispo inició las celebraciones eucarísticas en ambas parroquias recordando cómo ese día coincidía la fiesta de San Jorge, aunque litúrgicamente la celebraremos al día siguiente, y quiso tener unas palabras de agradecimiento y felicitación en la onomástica del Rector, Mn. Jordi Vásquez, que además este año celebrará en junio sus 25 años de ordenación presbiteral. También pidió rezar por la lluvia y por Cataluña en la fiesta de sus Patronos: Sant Jordi y la Virgen de Montserrat.
En su homilía el Arzobispo Joan-Enric glosó las lecturas proclamadas en el Domingo III de Pascua, subrayando cómo Jesús Resucitado se aparece a dos discípulos, caminando hacia un pequeño pueblo, llamado Emaús, situado a unos 11 km. de Jerusalén. Estos discípulos están de vuelta de todo, cansados y desanimados, porque han visto la muerte de Jesús y la cruz, y vuelven a casa decepcionados, con cierta voluntad de “abandonar”. Jesús Resucitado se les hace encontradizo por el camino, compartiendo con ellos sus pasos, y poco a poco les fue animando y abriendo los ojos a medida que les explicaba el sentido de las Escrituras. Ante la tentación del desánimo, el abandonar, y el perder la fe y la esperanza, debemos sentir muy cerca la presencia de Jesús Resucitado, a quien le debemos decir, como aquellos dos discípulos, “quédate con nosotros”.
El Arzobispo animó a los jóvenes confirmandos a vivir su fe como jóvenes, confiando en que Jesús Resucitado nos acompaña siempre en nuestro camino y que nos hace vencer la tentación de abandonar, y perder la fe, y nos hace fuertes y nos llena de su Espíritu para ser sus testimonios. Además, recordando la fiesta de San Jorge, el megamártir de la Iglesia, animó a los jóvenes confirmandos a luchar contra los dragones de hoy en día que, pueden tener diversas formas: el hedonismo, el pansexualismo, la corrupción, el afán del poder, la guerra, la desunión y carencia de amor, las adiciones a la pornografía y al sexo, el alcohol, la droga o sobre todo la falta de fe, de servicio y de cerrarse a los pobres y necesidades. Ante esto necesitamos tener la valentía que tuvo San Jorge y ser Jorges o Georginas capaces de luchar contra el mal, la injusticia y proteger a los más débiles y necesitados.
Al final de la Misa el Arzobispo regaló a los jóvenes confirmados un Nuevo Testamento animándoles a nutrirse de la Palabra de Dios; y felicitó a las dos corales parroquiales que habían solemnizado con los cantos las celebraciones pascuales de las confirmaciones.
