Bendición de las obras del Campanario y Confirmaciones en El Poal

El domingo 27 de mayo el Arzobispo de Urgell Mons. Joan-Enric Vives realizó la Visita Pastoral a la Parroquia de St. Juan Bautista de El Poal. A su llegada fue recibido por el Ilmo. Sr. Alcalde de la población, Sr. Rafel Panadés Farré y por el Rector de la Parroquia, Mn. Josep M. Aresté y por los feligreses allí reunidos.

Dentro la Eucaristía del domingo de la Santísima Trinidad, el Arzobispo administró el sacramento de la confirmación a 5 jóvenes de El Poal y Bellvís. En su homilía Mons. Vives remarcó la importancia de disfrutar de la fiesta de la Santísima Trinidad que nos revela que nuestro Dios es único pero con una comunión de amor de tres personas: Padre, Hijo y Espíritu Santo. Mons. Vives animó a los fieles a saber valorar y amar a Dios qué es lo más importante de la vida y al que debemos saber «adorar» con todo nuestro corazón, pensamiento y voluntad. Recordando la conocida máxima de San Agustín de Hipona «nos has hecho para Ti, Señor, y nuestro corazón está inquieto hasta que descanse en Ti», exhortó a la comunidad cristiana a poner los ojos y el corazón por encima de todo en Dios, ya que él es padre de misericordia que nos envió a su Hijo Jesucristo y que nos hará llegar a comprender su Misterio de Amor, gracias a la inspiración del Espíritu Santo. El Espíritu Santo que precisamente los 5 jóvenes que se confirmaban aquel domingo recibían en plenitud. Animó a perseverar en el camino de la fe ya que encontrar a Dios es lo más importante que podemos hacer; y obedecerle siempre, hace feliz. Animó a la comunidad cristiana a aceptarse como pecadores e indignos ante Dios pero, al mismo tiempo, somos hijos queridos suyos, ya que por el Bautismo y la Confirmación fuimos incorporados a la Iglesia y hechos hijos de Dios; y el Señor mantiene siempre sus promesas. Animó a amar mucho a María, la madre de Jesús, en ese mes de mayo en que toda la Iglesia la venera, ya que ella siempre nos lleva hacia su Hijo y encuentra la manera para acercarse a Él. Exhortó a los fieles a no perder nunca la esperanza y la fe y a confiar siempre en la misericordia de Dios. Finalmente, el Arzobispo puso como ejemplo la figura de quien fue rector de la Parroquia y que tiene un memorial, el Beato presbítero mártir, Mn. Francesc Castells que dio la vida por Cristo.

Terminada la celebración Mons. Vives regaló a los jóvenes confirmados un Nuevo Testamento exhortándolos a su lectura ya que es un libro por el que muchos cristianos, todavía hoy, ponen en peligro su vida.

A continuación, fuera de la iglesia tuvo lugar la bendición de las obras de restauración del campanario de El Poal de 1790. El Sr. Alcalde Ilmo. Sr. Rafel Panadés quiso agradecer la buena colaboración y entendimiento entre el Ayuntamiento, el Obispado y los fieles para poder consolidar y renovar el campanario de la iglesia parroquial y explicó las actuaciones llevadas a cabo que han permitido consolidar la estructura que presentaba alguna peligrosa grieta y desperfecto. Posteriormente, Mons. Vives, recordó cómo los campanarios y el sonido de las campanas son la voz de Dios que nos llama a levantar el corazón al Señor, y como las campanas acompañan la vida ordinaria del pueblo, y cómo con los diferentes toques de las campanas se comunicaba lo que ocurría en el templo parroquial y el pueblo. El Arzobispo bendijo las obras de restauración y se felicitó por poder así mejorar el patrimonio religioso y cultural de El Poal.

Una comida de hermandad con el Ayuntamiento y el Consejo parroquial de El Poal en la Rectoría cerró la gozosa visita.

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