Confirmaciones en Andorra la Vella

El viernes 4 de mayo por la tarde el Arzobispo de Urgell y Copríncipe de Andorra Mons. Joan-Enric Vives administró el sacramento de la confirmación a 30 jóvenes de la Parroquia de St. Esteve de Andorra la Vella. A su llegada a la Parroquia fue recibido por el Alcalde Menor de la Parroquia, Hble. Sr. Marc Pons y por el Rector y Arcipreste de los Valles de Andorra, Mn. Ramon Sàrries.
La celebración de la Eucaristía fue concelebrada por el Rector, Mn. Ramon Sàrries; el P. Albano Teixeira Fraga, sacerdote portugués, encargado de la atención a la comunidad portuguesa del Principado de Andorra y Mn. David Codina.

En su homilía Mons. Vives exhortó a los jóvenes a vivir con intensidad y alegría el sacramento que recibían ese día ya que Dios confirmaba el don en plenitud que un día les había dado por el Bautismo y ellos mismos volvían a decir sí al don con una actitud de apertura y acogida significado por el Amén que los jóvenes dicen al recibir la unción con el Santo Crisma. El Arzobispo les animó como cristianos a saber ir «más allá» de las apariencias y de los prejuicios y saber ver la realidad profunda del mundo y de las personas que los cristianos llaman «alma», infundida desde la concepción por Dios. Por eso toda persona tiene una dignidad inmensa que ninguna circunstancia de pecado puede arrebatar. En este sentido animó a los jóvenes confirmandos a evitar cualquier tipo de bullying o discriminación a los compañeros o a los diferentes porque todos somos hijos e hijas de Dios.

En las oraciones el Copríncipe Episcopal quiso rezar especialmente por las víctimas del terrorismo y por sus familiares en el día que el Reino de España había anunciado la disolución de la banda terrorista ETA. Rogó por que la paz y la ausencia de violencia armada pueda ser un momento propicio para la justicia y la concordia. Y que cesen en el mundo los ataques a la vida y dignidad de las personas.
Al final de la Misa la Parroquia regaló a los jóvenes un Nuevo Testamento y una pequeña paloma hecha con madera de olivo de Belén que el Arcipreste de los Valles de Andorra quiso regalar a los jóvenes confirmados para ayudar económicamente a los cristianos en Tierra Santa.

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