Comunicadores y periodistas garantes de esperanza
En estos momentos difíciles, los medios de comunicación nos permiten conocer lo que está pasando con todos sus matices y sus complejidades, ponen en contexto las informaciones y dan respuesta a nuestras preguntas. Además, difunden las indicaciones de las autoridades competentes y ayudan a desmentir las noticias falsas y los rumores que pueden angustiar o hacer caer en la desesperación o el desorden. Su servicio es esencial para una sociedad que ama la libertad y la verdad. El Papa Francisco recordaba que la figura del periodista debe ser siempre responsable, evitando expandir la desinformación y respetando siempre la esencia de su oficio: ser "custodios de las noticias", informar, ya que en el mundo contemporáneo, el comunicador no realiza sólo un trabajo, sino que tiene una verdadera y propia misión: "tiene la tarea, en el frenesí de las noticias y en el torbellino de las primicias, de recordar que el centro de la noticia no está en la velocidad en darla y el impacto sobre las cifras de audiencia, sino las personas". Abren ventanas a la esperanza y al futuro, dan a conocer iniciativas solidarias y ofrecen a quienes están confinados en casa, múltiples posibilidades para estar conectados con el mundo, para desarrollar sus cualidades y poderse entretener y aprender, vinculándonos a la humanidad, al arte y a la cultura. Sin esta tarea de los medios de comunicación, este aislamiento sería mucho peor.
Nuestro agradecimiento por parte de todos debería traducirse en apoyo social para que los medios puedan seguir llevando a cabo su tarea ahora y en el futuro, que se presenta difícil. ¡Que reciban nuestra consideración, respeto y ánimo, con nuestra intercesión! Entre todos sumaremos el esfuerzo de cada uno por construir un tiempo nuevo, lleno de valores, y con un estilo de vida mucho más sencillo y fraterno.